El pronóstico de crecimiento de la economía mundial para el 2024 se ha revisado al alza, de 2,8% a 3,0%, debido principalmente a las mejores perspectivas para Estados Unidos, la Eurozona y China. Las tasas de inflación han seguido bajando, aunque de manera menos pronunciada. 

La Reserva Federal ha mostrado suma cautela sobre cuándo iniciará la disminución de las tasas de fondos federales, mientras que el Banco Central Europeo (BCE) redujo sus tasas de interés en junio. 

Por otro lado, las perspectivas favorables para la oferta de petróleo, junto con cierta moderación de las tensiones geopolíticas durante el segundo trimestre, derivaron, entre otros factores, en menores presiones sobre los precios del petróleo. En cambio, los precios de los commodities agrícolas han aumentado debido a las condiciones climáticas más adversas en las principales regiones productoras. 

El pronóstico de crecimiento de Estados Unidos se ha revisado al alza y la inflación se ha estabilizado por encima de la meta. La actividad económica mantuvo una buena dinámica en la primera mitad del año, impulsada por la fortaleza de la demanda interna y la solidez del mercado laboral. 

En este escenario, se prevé un crecimiento del 2,4% para 2024, superior al esperado en marzo (2,1%). Por otra parte, la inflación ha seguido retrocediendo, pero más lentamente. La Reserva Federal mantuvo sin cambios el rango de tasas referenciales en sus últimas reuniones y el mercado prevé que el primer recorte de tasas de interés se materialice en el segundo semestre. En este contexto, los rendimientos de los bonos de largo plazo se han incrementado ligeramente y el dólar se ha fortalecido a nivel global durante el segundo trimestre. 

El desempeño económico de la Eurozona y China fue más positivo que el esperado en el primer trimestre. En la Eurozona, los indicadores económicos han mostrado algunas señales de recuperación y, como resultado, el pronóstico de crecimiento del PIB se ha ajustado al alza (de 0,5% a 0,7%). 

El BCE redujo sus tasas de interés referenciales en junio y espera aun mantenerlas en niveles restrictivos por el tiempo que sea necesario, a fin de garantizar la convergencia de la inflación a la meta. 

En cuanto a China, las perspectivas de crecimiento han mejorado, de 4,6% a 4,9%, en línea con los resultados superiores a los esperados del primer trimestre, y al impacto previsto de las medidas de estímulo anunciadas por el gobierno.