La Fed no tiene prisa en empezar a relajar la política monetaria, pero las opiniones cambiarán rápidamente si, como esperamos, el crecimiento del empleo se desacelera y la inflación continúa moderándose”.

Los funcionarios de la Reserva Federal (Fed) reconocieron, en su última reunión, que la economía estadounidense parece estar en desaceleración y que “las presiones sobre los precios disminuyen”, sin embargo, aconsejaron esperar y ver antes de comprometerse a recortar las tasas de interés, según las actas de la sesión del 11 y 12 de junio.

Las actas destacaron en particular una lectura débil de mayo en el Índice de Precios al Consumidor como uno entre “una serie de acontecimientos en los mercados de productos y laborales” que respaldan la opinión de que la inflación está cayendo.

El crecimiento salarial se ha desacelerado, dijeron algunos participantes, mientras que otros señalaron la reducción de precios entre los principales minoristas y los informes de sus propios contactos comerciales de que “el poder de fijación de precios ha disminuido”.

Pero si la narrativa en torno a la inflación indicaba que se creía que estaba cayendo, los responsables de las políticas de la Fed aún no estaban listos para abrir la puerta a recortes.

Los funcionarios “no esperaban que fuera apropiado reducir el rango objetivo de la tasa de fondos federales hasta que surgiera información adicional que les diera mayor confianza de que la inflación se mueve de manera sostenible” hacia el objetivo de 2%, según las actas.

En el momento de la reunión, el índice de precios del gasto de consumo personal, que se utiliza para fijar la meta de inflación de la Fed, se reportó en 2.7% anual en abril.

Los responsables de la política monetaria consideraron que la lectura era “elevada” y que representaba sólo una mejora “modesta” desde su última reunión, un hecho que justifica la continuación de una política monetaria restrictiva aun cuando la economía parece desacelerarse y las presiones sobre los precios disminuyen, según las actas.

El gobierno de Estados Unidos informó la semana pasada que el índice de inflación PCE cayó a 2,6% anual en mayo.

“La mayoría de los participantes evaluaron que el crecimiento de la actividad económica parece enfriarse gradualmente, y la mayoría de los participantes consideraron que la postura de política actual es restrictiva” y, por lo tanto, probablemente frenará aún más la economía y la inflación.

No obstante, al votar para mantener la tasa de política estable en el rango de 5.25-5.50%, donde se ha mantenido durante un año, “los participantes notaron que el progreso en la reducción de la inflación había sido más lento este año de lo que esperaban en diciembre pasado”, dijeron las actas, y “algunos participantes” enfatizaron la necesidad de paciencia antes de recortar las tasas, y “varios” citaron la posible necesidad de seguirlas aumentando si la inflación resurge.