El presidente de la República, Santiago Peña, anunció de manera oficial la nueva tarifa de la energía de Itaipú, el cual asciende a  USD 19.28 por kilovatio-mes para los próximos tres años. Al tiempo que señaló el inicio del proceso de la revisión del Anexo C.

Luego de meses de intensas negociaciones, Paraguay y Brasil han llegado a un acuerdo histórico que establece una tarifa récord por la energía generada en la represa binacional de Itaipú. La tarifa acordada, fijada en USD 19.28 por kilovatio-mes para los años 2024, 2025 y 2026, marca un hito en las relaciones energéticas entre ambos países.

A través de una mensaje, el jefe de Estado, Santiago Peña, señaló que este acuerdo, anunciado como un logro significativo por ambas partes, representa un paso adelante en la optimización de los recursos energéticos compartidos.

El nuevo precio de la tarifa regirá durante tres años y generará alrededor USD 280 millones de ingresos por royalties, USD 650 millones para inversión social, USD 265 por compensación de energía y USD 53 en utilidades de capital, totalizando USD 1.250 millones anuales.

Asimismo, Peña resaltó que se invertirá en áreas fundamentales como la salud, seguridad, educación, infraestructura, entre otros, como así también aseguró que la fijación de esta tarifa récord no solo asegura condiciones económicas estables para la producción y venta de energía, sino que también sienta las bases para una cooperación energética más sólida y beneficiosa en el futuro.

“Esta negociación representa un triunfo para Paraguay y para Brasil. Hemos logrado un acuerdo histórico que no solo beneficia a ambas naciones, sino que también genera importantes ingresos adicionales que nos permitirán llevar a cabo inversiones largamente postergadas”, expresó el Presidente de la República.

Por su parte, durante la conferencia de prensa el titular de la cartera de Industria y Comercio (MIC), Javier Giménez, explicó sobre la decisión de establecer esta tarifa por un periodo de tres años (2024 al 2026), quien destacó la importancia de evitar negociaciones frecuentes y desgastantes con la contraparte. Este enfoque permitirá a ambas naciones planificar a largo plazo y concentrarse en el desarrollo económico y social.

Además, resaltó que dentro de estos tres años, se prevé una inversión significativa, así como en el fortalecimiento de la capacidad de distribución y transmisión de energía en Paraguay, el cual caracterizó como “fundamental para prepararse para la próxima fase de negociaciones”, en la que se discutirá el Anexo C que regirá la tarifa para el periodo posterior.

Giménez resaltó que el objetivo a largo plazo es consumir la energía localmente mediante la industrialización, lo que multiplicaría su valor agregado y contribuiría al desarrollo económico del país. Esta estrategia está alineada con proyectos como el corredor bioceánico y la hidrovía, que buscan impulsar la industria y el comercio en la región.

Sobre el anexo C, el presidente Peña comentó que a partir de este acuerdo se da inicio al proceso de la revisión del Anexo C, cuya definición será clave para el desarrollo del Paraguay en las próximas décadas.

“Lo haremos con el mismo espíritu de patriotismo que nos ha permitido este gran logro. Estamos en un punto de inflexión en el desarrollo de nuestro país y el futuro se presenta lleno de oportunidades y posibilidades”, señaló el jefe de Estado.