La inflación de Europa se incrementó 1,7% en marzo

Publicado en fecha 19-04-2021
La tasa de inflación anual de la zona euro se situó en marzo en 1,3% desde 0,9% de febrero, lo que representa el mayor incremento de los precios desde enero del 2020 como consecuencia del impacto de la evolución de los precios de la energía, según la segunda estimación del dato publicada por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.

En el conjunto de la Unión Europea (UE) la tasa de inflación se aceleró en marzo a 1,7% desde 1,3% registrado en febrero, lo que también representa el mayor incremento anual de los precios desde enero del 2020.

El repunte de los precios de la zona euro en marzo obedece al impacto de la evolución de la energía, que en el tercer mes del 2021 aumentó 4,3% anual, frente a la caída de 1,7% observada el mes anterior, mientras que los alimentos frescos se encarecieron 1,6%, una décima más que en febrero, y los servicios subieron 1,3% anual, frente a 1,2% del mes anterior.

De su lado, el costo de los bienes industriales no energéticos registró en marzo un incremento anual de 0,3%, por debajo del encarecimiento de 1% observado en febrero.

De este modo, al excluir el impacto de los precios de la energía, la tasa de inflación interanual de la zona euro se situó en 1%, dos décimas por debajo del dato de febrero.

Al dejar fuera también del cálculo el efecto de los alimentos frescos, el alcohol y el tabaco, la tasa de inflación subyacente de la zona euro se moderó en marzo a 0,9% desde 1,1% de febrero.

Entre los países cuyos datos estaban disponibles, únicamente Grecia ha registrado en marzo una caída de los precios, con un retroceso anual de 2%, mientras que Irlanda, Chipre, Portugal y Eslovenia registraron cada uno un alza de 0,1 por ciento.

De su lado, los mayores incrementos de precios en la UE correspondieron a Polonia (4,4%), por delante de Hungría (3,9%), así como de Rumanía y Luxemburgo (2,5% cada uno).

En cuanto a España, la tasa de inflación se situó en marzo en 1,2%, frente a -0,1% registrado en febrero, lo que ha reducido a sólo una décima el diferencial de precios favorable al país respecto de la eurozona.