El crecimiento de la economía de Estados Unidos se aceleró más de lo previsto en el primer trimestre, superando las expectativas de analistas e incluso del gobierno de Donald Trump, según una primera estimación del Departamento de Comercio publicada el viernes.

La expansión de la primera economía del planeta fue de 3,2% anual entre enero y marzo, frente a 1,9% esperado por los analistas en ese periodo y luego de 2,2% en el último trimestre del año pasado.

El resultado trimestral fue el mejor en cuatro años, pese al cierre parcial del gobierno que se extendió por un récord de cinco semanas entre diciembre y enero, amenazando el desempeño de la economía por una disputa sobre los fondos para la construcción de un muro en el límite con México.

El presidente estadounidense celebró el resultado. “Es un número increíble”, dijo Donald Trump desde la base militar de Andrews cerca de Washington, antes de volar a Indiana. “Tenemos un crecimiento fantástico y una inflación muy baja, y a nuestra economía le está yendo muy bien”, agregó.

El economista jefe de la Casa Blanca, Larry Kudlow, había anticipado a inicios de esta semana que el crecimiento en los primeros tres meses, generalmente más débil que el resto del año, estaría cerca de 3 por ciento.

Pero puede que los datos sean revisados cuando ingresen más información en mayo y junio.

En el trimestre, las exportaciones avanzaron 3,7% y las importaciones, que representan un costo para el PIB, cayeron, permitiendo a la balanza comercial contribuir con 1,03 puntos al crecimiento.

Este buen desempeño al inicio del año es buena noticia para el gobierno de Trump, que asegura que puede hacer progresar de manera duradera la economía de Estados Unidos a un ritmo de 3% o superior este año, luego de 2,9% del 2018.

Por otro lado, podrían hacer reflexionar a la Reserva Federal (Fed), que tendrá una reunión de política monetaria el miércoles y que ha declarado una pausa provisoria en las alzas de las tasas de interés, anticipando una desaceleración del crecimiento económico y una inflación débil.

Economistas pusieron interrogantes a los entusiastas, al indicar que algunos de los factores relacionados con el crecimiento en los primeros meses del año se convertirán en un lastre en los próximos meses.

Diane Swonk, economista jefe de Grant Thornton, calificó el informe de falso. “Este es uno de los trimestres de crecimiento de 3% más débiles que he visto”, dijo en una nota de análisis. “El impulso subyacente en la economía doméstica fue particularmente débil”, agregó.

Según se informó, el crecimiento fue impulsado por un aumento en el gasto de los gobiernos estatales y locales, la creación más rápida de inventarios por parte de las empresas y cierta recuperación en las ventas de viviendas.

La expansión, según el reporte oficial, podría haber sido aún más fuerte sin el cierre del gobierno, porque la caída en el gasto de los trabajadores estatales probablemente redujo 0.3 puntos porcentuales el crecimiento en el trimestre.

No obstante, Swonk sostuvo que la economía tendrá que “agotar los inventarios que se han acumulado durante la mayor parte del año”.