Por Celia Mendoza

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El presidente de la Unión Industrial del Paraguay (UIP), Eduardo Felippo, refiere que hay un déficit del sentido de la responsabilidad, un valor que es fundamental para encarar cualquier cosa en la vida, incluso en aquellas actividades que generan placer y que forman parte del vivir cotidiano de las personas.

Fue en un encuentro con jóvenes en edad de buscar el primer empleo, donde el industrial compartió su experiencia en el campo laboral y profesional. Para Eduardo Felippo, la responsabilidad es ese ingrediente que nos permite hacer las cosas de manera correcta. Llegar a tiempo al trabajo, al estudio, a los torneos de fútbol, prepararse para hacer bien todo lo que necesitamos y queremos hacer, y hacer en forma cada actividad que nos toca realizar.

“Y muchas veces creo que eso nos está faltando, pero la responsabilidad se aprende a desarrollar en la familia; y si no es en la familia tiene que ser en la escuela… Y creo que eso falta en las familias, por eso quiero hablar desde el punto de vista de engendrar, de generar y de llevar adelante la responsabilidad. ¿Y qué es la responsabilidad? Es hacer las cosas bien, hacer las cosas en tiempo, y para ello también tenemos que saber administrar el tiempo de cada uno, no es hacer vai-vai (mal, mal), péichante (así nomás), sino hacer en forma”, insta a los jóvenes el propietario de la empresa Trafopar, pionera en la producción de transformadores en Paraguay.

Felippo manifiesta que la responsabilidad es la llave que abre el camino del éxito, pero advierte a los jóvenes que el sendero que lleva a la cima de la prosperidad está compuesto por tramos que deben ser transitados con seguridad, confianza, respeto y sobre todo con un buen desarrollo de las habilidades personales.

En ese contexto, el titular de la UIP invita a los jóvenes a descubrir sus habilidades, señala que uno viene al mundo con un bagaje de cualidades, que en algunos casos se manifiestan de forma explícita, pero que muchas veces están escondidas, hay que hallarlas y desarrollarlas.

“Soy ingeniero industrial; se supone que los ingeniero son los reyes de los números, pero yo no soy bueno en números, no tengo buena memoria, no me pidan estadísticas de algo… No obstante, sé qué parte de la ingeniería es la que me gusta y sobre todo sé cómo aplicarla, de eso se trata”, explica.

El industrial aconseja a los jóvenes a no desesperarse… “Cuando sientan que el mundo se les cae encima, que tienen tanto por hacer y que no saben por dónde empezar… tomen papel y lápiz y comiencen a escribir, hagan una lista de las metas, de lo que ustedes creen que pueden que hacer y cómo lo tienen que hacer… Van a ver que es una cosa simple y que además les va a sobrar tiempo”, indica.

Y agrega que lo importante es ir venciendo las metas, para ello recomienda escribir las metas a corto y mediano plazo por un lado, y las de largo plazo en otro papel. “No se asusten si creen que una cosa es más difícil que otra y que pueden equivocarse”, dice el empresario, al tiempo de recordar una frase que acostumbra a decir: “No me preocupa cometer errores porque tengo toda una vida para enmendarlos”… Lo errores sirven para aprender, para corregir lo que se hace mal y muy especialmente para nunca más volverlos a cometer, exclama el gremialista.

Para Felippo, la capacitación es tan importante en el desarrollo personal y profesional de los jóvenes como lo es el entorno, porque ambos elementos sirven para situar la realidad que se está viviendo, ver quién está haciendo, qué está haciendo y cómo lo está haciendo; a la vez de que esto sirve de guía al joven para imitar los buenos ejemplos e incluso para mejorarlos.

Felippo alienta también a los jóvenes a ser solidarios con sus pares, a ayudar a los que no están pudiendo desenvolverse a superarse, porque –en su opinión– no sirve de nada eliminar a la competencia, ganar, ser exitoso y no tener con quién compartir los logros. “La vida no se construye encima de cadáveres, se construye encima de oportunidades y codo a codo con quienes también caminan hacia el éxito”, subraya el empresario.

1: “Encaren la vida con seguridad, sepan que son capaces de hacer porque otras personas ya lo han hecho y lo han logrado. Siéntanse con ganas y alegría de encarar el mundo, siéntase fuertes. Ustedes pueden”.

2: “Busquen la forma más responsable de llevar adelante todas las actividades que van a hacer, incluso, si van a ir a jugar fútbol. Sean puntuales, prepárense para dar lo mejor de sí en el estudio, en el fútbol, en donde sea”.

3: “Encaren la vida con alegría, confianza y de cara con su entorno. El entorno no es su enemigo, al contrario es su mejor aliado: mamá, papá, hermanos, amigos”.