Parra es un productor que quedó ciego, sin embargo,  viene trabajando de manera sostenible en su finca familiar, no siendo un impedimento para dar seguimiento a la situación de su cultivo, ya que tiene muy desarrollada la habilidad en las manos a través del cual identifica la condición del mismo. Por otra parte, sus hijos le ayudan para el manejo de la parcela, donde integra la producción pecuaria con la agricultura, preparando los alimentos para sus lecheras, lechones y aves con cultivos de grano, especialmente soja y maíz, así como avena y trigo, prepara el ensilado y balanceados.  

El cooperador del INBIO antes trabajó en campos de grandes productores hasta su accidente, suya consecuencia fue la ceguera, a partir de ahí trabajó en su finca de 4,5 hectáreas. Todo lo que se produce es bajo el sistema de siembra directa, mínima remoción del suelo, rotación de cultivos y uso de abonos verdes, mejorando y conservando de esta forma las propiedades de su suelo.

Realiza una producción diversificada en el que se integran cultivos de granos, yerba mate y horticultura, demostrando a la comunidad que se puede producir de manera sostenible y rentable en una superficie pequeña y de esta forma ingresar recursos a la economía familiar todo el año. En su parcela de yerba mate, Parra siembra soja entre hileras como un recuperador de suelo y aportante de nitrógeno, al igual que en la parcela de maíz se integra crotalaria, aumentando la población de microorganismos, fomentando la biodiversidad del suelo.

La parcela demostrativa que tiene instalada el INBIO en su finca sirve como escuela a cielo abierto para toda la comunidad, donde se ejemplifica que la adopción de las buenas prácticas mejora el suelo y con la diversificación y el valor agregado a la producción se puede mejorar el ingreso familiar y de esa forma fortalecer a las familias del sector agrícola.

Isidro Parra con un poco más de cuatro años en el Programa ha mejorado bastante en las prácticas agrícolas, considerando que todo esto es un proceso de aprendizaje,  en donde el PASB se adecua a las condiciones del productor, a las facilidades de maquinarias y equipos con que cuente y a las posibilidades de insertarse en el mercado, independiente del tamaño de la parcela,  demostrando que con conocimiento y seguimiento constante, se puede lograr el desarrollo familiar. Hoy el  suelo de la parcela  está en excelentes condiciones, con niveles de resistencia a la penetración radicular mínima y contenido de nutrientes elevado, y  la diversificación que se practica en toda la propiedad.

Es importante resaltar que la propiedad de Isidro Parra se está cumpliendo los pilares de la sostenibilidad, que son cuidar el ambiente (ambiente), generar ingresos (economía) y mejorar las condiciones de la familia (social). Las prácticas que se llevan adelante, además de los buenos rendimientos de los cultivos, le da un valor agregado, convirtiendo la materia prima en alimentos para la producción de leche, carne de cerdo y aves de doble propósito.

Esta campaña de zafra 2024-2025 que se aproxima lo encuentra expectante, en su suelo tiene cobertura de avena y nabo que facilitan el manejo de malezas de difícil control en la pre siembra. En la parcela de Parra estaremos implantando cultivos de soja, maíz y cultivos de abonos verdes, de modo a que se pueda seguir mostrando que respetando los principios de la siembra directa se puede ir mejorando la productividad de los suelos.

El Instituto de Biotecnología Agrícola (INBIO) es una asociación civil sin fines de lucro, que tiene el propósito de promover un adecuado acceso al país de los productos derivados de la biotecnología agropecuaria y la incorporación ordenada de los mismos a la producción nacional, así como promoción y desarrollo de la investigación de biotecnología nacional. Siete gremios forman parte de la institución: CAP, APS, APROSEMP, FECOPROD, CAPECO, PARPOV y UNICOOP.