El FMI advierte al mundo de los peligros de 
las reformas estancadas y del proteccionismo

Publicado en fecha 10-10-2016
“En general, la incertidumbre y los riesgos a la baja son elevados, mientras que los vientos en contra persistan”, afirmó el Comité Financiero y Monetario del Fondo, en un comunicado presentado por el presidente del órgano, Agustín Carstens, y la directora gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI), Christine Lagarde.

En su conferencia de cierre, la institución financiera internacional insistió en los ejes de las reuniones que se resume en un mensaje poco optimista: “Las perspectivas están cada vez más amenazadas por políticas introvertidas, incluido el proteccionismo, y reformas estancadas”.

Como remedio, las autoridades deben “utilizar todas las políticas disponibles -reformas estructurales, fiscal y monetaria- tanto individual como colectivamente” para revitalizar el débil crecimiento mundial.

En concreto, Lagarde ha apuntado el caso de Alemania, principal economía europea y que cuenta con amplio espacio fiscal, para que se utilice de modo que se eleve la demanda en la zona euro, cuyas proyecciones son de apenas 1.7% para este año.

El tira y afloja con Berlín es una constante de las últimas asambleas, con el ministro alemán Wolfgang Schäuble encarnando la posición opuesta de crítica al exceso de deuda y los riesgos que está sembrando la política expansiva en las economías avanzadas.

Asimismo, para el Fondo es especialmente preocupante el auge del proteccionismo que se está viendo en países como el Reino Unido tras el voto del Brexit o en la campaña electoral en Estados Unidos, con los candidatos republicanos Donald Trump y demócrata Hillary Clinton expresando recelos sobre el proceso de globalización y su intención de renegociar acuerdos comerciales.

En un cierto cambio de tono, el comunicado reconoce que no todo han sido beneficios en la reciente integración global, por lo que expresa su compromiso de “diseñar e implementar políticas que encaren las preocupaciones de aquellos que se han quedado atrás y asegurar que todo el mundo tiene la oportunidad de sacar partido de la globalización y cambio tecnológico”.

No obstante, Lagarde defendió los efectos positivos netos de la globalización, y consideró erróneos los llamados a elevar las barreras en un momento en el que el comercio “es más necesario que nunca”.

También se hizo eco de estos comentarios el secretario del Tesoro de Estados Unidos, Jack Lew, quien instó “a no cerrarnos al mundo, y redoblar nuestros compromiso por asegurar un crecimiento compartido”.

Por su lado, el presidente del Banco Mundial, Jim Yong Kim, reconoció “el tremendo enfado contra el libre comercio”, pero aseguró que revitalizar la economía global y reducir la pobreza no se va a conseguir si no se da un impulso decidido al comercio.