Ingresos generados por aumento de inversión no compensan las exoneraciones tributarias

Publicado en fecha 28-12-2015
En la edición N°36 de Economía y Sociedad, Fernando Masi, en su artículo De exoneraciones fiscales y desarrollo, dice que “la nueva Ley de Garantía de Inversiones promulgada recientemente no se aparta del poco entendimiento de los decisores de políticas públicas acerca de los factores que atraen y dinamizan las inversiones en los sectores de transformación productiva en el Paraguay”.
 
Masi agrega que “no existe ningún estudio que demuestre que los ingresos del fisco generados por el aumento de la inversión productiva hayan compensado satisfactoriamente las exoneraciones tributarias (también denominadas gastos tributarios), ni en qué medida la economía se vio beneficiada en términos de empleo y de efectos multiplicadores en diversos sectores”.
 
Lo que sí las estadísticas muestran “es que la inversión total (mayormente privada) se redujo de 17% del PIB en 2005 a 15% en los últimos años. Esto es, en el período de mayor crecimiento de la economía paraguaya desde la terminación de Itaipú. Y, aunque el sector industrial ha venido creciendo a un promedio anual del 3% desde 2005, su participación en el PIB disminuyó del 13% al 10%”. El experto destaca que “la inversión extranjera directa (IED) ha tenido un incremento significativo de 2007 en adelante. De todas maneras, la mayor parte de esta inversión ha respondido a una creciente demanda internacional de agro alimentos procesados como el aceite de soja y la carne (frigoríficos), y no precisamente a la presencia de regímenes de incentivos a la producción manufacturera”.
 
El autor resalta que “las mayores tasas impositivas, inclusive altas retenciones a las exportaciones, no desalentaron la producción de los commodities agrícolas en países vecinos  . Además “todos los incentivos fiscales existentes y las bajas tasas impositivas no tuvieron como resultado un fuerte dinamismo de las actividades manufactureras. La industria creció, es cierto, pero no a los niveles esperados para sostener un crecimiento del PIB alto y compensar las volatilidades originadas en los precios internacionales de los commodities y en los cambios climáticos”.
 
Por otro lado, el analista recuerda que “las encuestas anuales internacionales realizadas a empresarios nacionales y extranjeros que operan en el país señalan que los principales obstáculos para la inversión en el Paraguay son la corrupción, la falta de calificación de la mano de obra, la inadecuada infraestructura y la ineficiencia de la burocracia gubernamental, en ese orden y no las tasas impositivas”.
 
Masi concluye diciendo que “las tasas impositivas son extremadamente bajas en Paraguay. Tratar de eludirlas o reducirlas en nombre del desarrollo productivo no parece consecuente con un sistema económico moderno. Como decía Jeffrey Sachs, en una reciente visita al Paraguay, parafraseando a un connotado jurista norteamericano: “Taxes are the price we pay for a civilized society” (“Los impuestos son el precio que pagamos por una sociedad civilizada”).