Aguas liberadas por ITAIPU permiten movilizar la exportación de 200.000 toneladas de soja

Publicado en fecha 20-05-2020
La apertura de las compuertas de ITAIPU permitió liberar el caudal necesario para volver a movilizar las barcazas que transportan la producción agrícola del Paraguay a los mercados de exportación, a través de la hidrovía Paraguay- Paraná. La Binacional abrió su vertedero en la madrugada del lunes, a fin de coadyuvar a la dinamización del comercio exterior, lo que permite  más de 150 barcazas se movilicen, y retomen sus labores unos 500 trabajadores, encargados del embarque y navegación.

La medida asumida por la ITAIPU Binacional facilitará el transporte fluvial de 200.000 toneladas de soja, producidas principalmente en Alto Paraná e Itapúa, que significan unos 100 millones de dólares de ingreso al sector productivo. Además permitirá movilizar barcazas vacías para sacar en torno a 1.500.000 toneladas de soja, que representan unos 600 millones de dólares más, según datos proporcionados por Juan Carlos Muñoz, vicepresidente del Centro de Armadores Fluviales y Marítimos del Paraguay.

“Ha sido un gran alivio y de gran ayuda el flujo de agua que empezó a liberar ITAIPU porque teníamos 152 barcazas paradas hace 50 días por la bajante del río Paraná”, expresó el directivo, al tiempo de comentar que los primeros convoyes comenzaron a pasar este martes por la esclusa de la represa de Yacyretá, para continuar viaje rumbo a los puertos marítimos del río de la Plata.

La flexibilización del nivel del embalse fue aprobada el pasado miércoles por el Consejo de Administración de la ITAIPU, respondiendo a una solicitud de la Cancillería paraguaya. En el primer día, el caudal vertido promedio fue de 474 metros cúbicos por segundo, con un máximo de 1.376 metros cúbicos por segundo.

Eduardo Viedma, consejero paraguayo de ITAIPU, explicó que el Ministerio de Relaciones Exteriores solicitó un vertimiento de 8.500 metros cúbicos por segundo (m³/s), por 12 días. Ese volumen, sumado a 500 m³/s que aporta el río Yguazú hará que el vertimiento llegue a 9.000 m³/s, con lo cual se podrán recuperar las condiciones de navegabilidad del Paraná y así enviar las barcazas con productos nacionales al mundo.

No afectará la producción de energía
La decisión del Consejo de Administración está enmarcada dentro de la misión socioambiental de la Entidad.  Acerca de los posibles efectos negativos para la operación de la Central, Viedma aclaró que estos no sucederán, considerando la demanda actual de energía eléctrica por parte de Paraguay y Brasil.

“Según el informe realizado por la Dirección Técnica de la Entidad, no afectará la producción eléctrica de la Central. Esto también sumado a la disminución de consumo eléctrico en ambos países, debido a la actual pandemia que aqueja a nuestra región y al mundo”, precisó el consejero.

Apuntó que la disminución del embalse se estima recuperar en el periodo de lluvias previstas para mediados de este mismo año.

Remarcó que, si bien esta coyuntura es única y sin precedentes, la sequía ha sido una dificultad  con la cual la Entidad siempre ha lidiado en forma exitosa todos estos años, gracias a la capacidad técnica y humana de ITAIPU.