En el anuncio, realizado a través de un material audiovisual difundido en diferido, el senador Blas Llano informó que ante la aparición del coronavirus en nuestro país el Congreso no puede estar exento de tomar algunas medidas como en cuanto a la higiene, salud, la no aglomeración de personas que visitan la sede para gestiones o tramites, como así también la reducción de la carga horaria de los funcionarios. 

En ese sentido, dijo el titular del Congreso, que recibió la llamada del legislador Stephan Rasmussen, quien le manifestó la posibilidad que, desde la presidencia del Congreso, con el apoyo de todos los senadores, se pueda hacer unos recortes y una reducción importante en algunos programas que tiene nuestra institución.

Aclaró que han disminuido al 100% todos los programas que se pueden reducir al porcentaje mencionado. “Esto rige a partir de hoy hasta fin de año, se utilizará este medio para ir trasmitiendo nuevas decisiones, ya que se trabaja en otros aspectos para ayudar”, aseguró.

El senador Blas Llano comunicó que se dispondrá la reducción, por resolución, de varios objetos de los gastos aprobados por la Ley de Presupuesto para el presente Ejercicio Fiscal. Los mismos serán puestos a disposición del Ministerio de Hacienda para que, en caso necesario, realice una reprogramación general del presupuesto a fin de redireccionar a las necesidades del Ministerio de Salud Público y Bienestar Social (MSP y BS).

Cabe mencionar que la reducción del presupuesto solo puede hacerse por medio de una Ley o en forma excepcional por decreto del Poder Ejecutivo.

No obstante, los montos comprometidos a no ejecutar son: de la Cámara de Senadores Gs. 2.950.000.000 y del Congreso Nacional Gs. 7.595.000.000, que hacen a un total de Gs. 10.545.000.000.

Estos ajustes afectarán, entre otros, los siguientes objetos del gasto para el Ejercicio Fiscal 2020: pasajes y viáticos, combustibles y lubricantes, servicio de catering, remuneración extraordinaria, remuneración adicional, adquisición de equipos de oficina y computación, maquinarias, equipos y herramientas en general, alquileres y derechos.

También se menciona a aportes de entidades educativas e institutos, bienes de consumo de oficinas e insumos, construcciones, gastos por servicio de mantenimiento, otros gastos por servicios de consumo, bines de consumo, gastos de inversión y reparaciones mayores, gastos de personal, servicios en general, productos de papel, cartón e impresos, servicios de técnicos y profesionales, servicio de capacitación y adiestramiento y lo relacionado a textiles y vestuario.

A su turno, el senador Stephan Rasmussen, dijo que fue una iniciativa que surgió de la ciudadanía para ver cómo el Estado puede aportar en esta crisis sanitaria y poder identificar todos los gastos no imprescindibles en los tres poderes del Estado, y destinar lo ahorrado al Ministerio de Salud.

“El Ministerio de Salud se tiene que preparar para lo peor, ya sea, en camas de terapia intensiva, instrumentalización, respiradores; es muy importante que todos podamos contribuir con esto y sortear esta crisis sanitaria en la brevedad posible y con la menor cantidad de personas afectadas”, manifestó el senador Rasmussen.

Por su parte, el legislador Enrique Salyn Buzarquis, expresó que es momento que el Estado deba ajustarse los cinturones. “Felicito la decisión del presidente del Senado y la propuesta del senador Rasmussen; insto al Poder Ejecutivo a tomar esta medida, en este caso si el Senado lo hace y el Congreso lo hace, puede hacerlo el Poder Judicial y todas las instituciones del Estado paraguayo”, apuntó.