Wall Street se derrumbó más de 3% el martes, liderado por los sectores bancario e industrial, luego de que el mercado de bonos del Tesoro envió señales inquietantes sobre el crecimiento económico y los inversores se volvieron a preocupar por el comercio mundial.

El presidente de la Reserva Federal de Nueva York, John Williams, dijo que el banco debería seguir elevando las tasas de interés durante el próximo año, sumando incertidumbre a los inversores sobre el ritmo de alzas de tasas.

Estos comentarios siguieron a los que formuló la semana pasada el presidente de la Fed, Jerome Powell, que dieron impulso a las acciones pues fueron interpretados como sugiriendo un ritmo menos agresivo de alzas de tasas. “Quizás no tengamos una Fed tan moderada como pensábamos”, dijo Joseph LaVorgna, economista jefe para las Américas de Natixis.

Los inversionistas se focalizaron en los rendimientos de los bonos del Tesoro. El diferencial de los retornos de los títulos a dos y 10 años se contrajo a su menor nivel en más de una década, un indicador muy observado porque la llamada “inversión” de la curva precedió las recesiones en Estados Unidos los últimos 50 años.

El Promedio Industrial Dow Jones perdió 3,1%, a 25,027.07 unidades, y el índice S&P 500 cayó 3,24%, a 2,700.06 unidades. El índice NASDAQ Composite perdió 3,8%, a 7,158.43 unidades.

El S&P 500 registró su mayor caída porcentual diaria en unos dos meses, revirtiendo parte del avance del lunes y la semana pasada, cuando el referencial marcó su mayor avance porcentual semanal en casi siete años.

Las acciones subieron con fuerza el lunes tras la tregua comercial establecida el fin de semana entre Estados Unidos y China luego de la reunión de sus presidentes en el marco de la Cumbre del G20, pero el optimismo de los inversores por una resolución a la disputa que los enfrenta se disipó el martes.

“La venta masiva que hemos visto es por echar un vistazo a la conversación sobre aranceles y darse cuenta de que no se ha resuelto nada y que todavía hay mucho trabajo por hacer, y que algo de la euforia fue más por los titulares que por el contenido”, dijo Dolores Rubin, operadora de Deutsche Bank Wealth Management.