Los ministros de Economía y Finanzas de la Unión Europea (UE) aprobaron fijar la tasa general del Impuesto al Valor Agregado (IVA) en un mínimo de 15% de forma permanente, por lo que la tasa podrá ser superior a esa cifra, como en España, donde alcanza 21%, pero no inferior.

Según explicó el Consejo de la UE en un comunicado, esta medida “previene divergencias excesivas en las tasas del IVA en los estados miembro” y “elimina el riesgo de distorsiones en la competencia mediante tasas de IVA más bajas que tendrían un impacto en las compras y el comercio transfronterizos”.

La tasa mínima de 15% en la tasa general se mantuvo desde que ese impuesto se aplicó por primera vez en el año de 1993.

Se extendió por última vez en mayo del 2016 para dos años y esa prolongación expiró el 31 de diciembre del 2017.

En cualquier caso, las propuestas para sustituir el sistema transitorio actual del IVA con un mecanismo definitivo se están debatiendo en el club comunitario.

La Comisión Europea ya hizo públicos sus planteamientos en enero y mayo del 2018. Para aprobar la directiva era necesaria la unanimidad de los estados miembro, pero no requiere el aval de la Eurocámara.