Aranceles de China cambian los flujos comerciales de la soja en el mundo

Publicado en fecha 19-04-2018
El mayor comprador mundial de soja, China, no solo podría terminar pagando más por la oleaginosa si fija aranceles a las importaciones estadounidenses, sino que también podría crear nuevos compradores de estos envíos a medida que la decisión agita los flujos comerciales globales.

El voraz apetito chino por la soja supera el pronóstico de exportaciones mundiales, excluyendo a Estados Unidos, por lo que podrían emerger flujos comerciales con los cultivos en los estados de Illinois y Iowa, estableciéndose un posible desvío a través de plantas de molienda en América del Sur.

La propuesta china de fijar un arancel del 25 por ciento en respuesta a los planes de Washington para imponer aranceles a varios productos chinos, ya ha subido los precios en proveedores alternativos como Brasil y Argentina.

La disputa es la última de una serie de batallas comerciales iniciadas desde que Donald Trump se convirtió en presidente de Estados Unidos en enero de 2017, y ya está afectando al sector agrícola del país.

“Todo el lío de la guerra comercial entre Estados Unidos y China hizo subir los precios internos”, dijo Ezequiel de Freijo, economista jefe de la Sociedad Rural en Argentina.

El país sudamericano ya ha comprado 240.000 toneladas de soja de Estados Unidos, su mayor adquisición en 20 años, con ventas registradas para el año comercial 2018/19, que comienza en septiembre.

De Freijo dijo que un escenario de grandes primas para la soja sudamericana podría crear una “triangulación” con los molinos argentinos, con compras a Estados Unidos para enviar después sus productos a China.

El creciente costo de la soja sudamericana también mejoró la competitividad de los envíos estadounidenses en otros mercados como la Unión Europea, el segundo importador mundial.

“Si China vacía de soja a América del Sur, otros grandes importadores como la UE, México, Japón, Taiwán, Tailandia, Indonesia, Vietnam y Egipto tendrán que encontrar nuevos suministros”, dijo un operador europeo.

“Creo que la respuesta es Estados Unidos. Creo que muchos compradores golpearán las puertas de los exportadores de soja estadounidenses en los próximos meses si la guerra comercial se pone en marcha realmente”, agregó.

El aumento de las primas para la soja sudamericana ya está empezando a cambiar los flujos comerciales. “Ya estamos viendo un cambio de la UE de Brasil (a Estados Unidos) porque sus precios han despegado”, dijo un operador estadounidense.

Se pronostica que China importará un récord de 97 millones de toneladas de soja en 2017/18, un producto que se usará en su mayor parte para alimentar a su ganado, que incluye la cabaña porcina más grande del mundo.

BRASIL, PRINCIPAL PROVEEDOR
Brasil es el principal proveedor de China, con un 53% del total de compras en el 2017, seguido por Estados Unidos con un 34% y Argentina con un 7%, según datos de aduanas.

“Brasil no tiene medios para sustituir todo el suministro de soja que va desde Estados Unidos a China”, dijo Fabio Trigueirinho, director ejecutivo de Abiove, la asociación de trituradoras de semillas oleaginosas.

“Aunque es probable que Brasil aumente sus exportaciones de soja a China (si se imponen los aranceles), los proveedores estadounidenses pueden sacar provecho en mercados donde la cuota de exportaciones brasileña caerá”, añadió.

También habrá resistencia por parte de Brasil para impulsar los envíos a un país que ya se lleva el 70% de sus exportaciones.

“Como productores, no podemos depender de un solo comprador”, comentó José Sismeiro, productor de soja y maíz en el estado de Paraná.

UE bloquearía exportaciones de pollo brasileño
La Unión Europea está planeando bloquear las exportaciones de nueve plantas avícolas de la empresa BRF y podría revocar credenciales de importación a otras instalaciones de pollo de Brasil, dijo el martes el ministro de Agricultura del país sudamericano.

El ministro Blairo Maggi afirmó que prevé que la Unión Europea emita el una lista final de las plantas brasileñas prohibidas, que incluye las de BRF y posiblemente las de otras empresas, tras una votación que tiene planeada realizar la Comisión Europea sobre el asunto.

Sus comentarios fueron formulados tras volver de una misión comercial en Bruselas la semana pasada para convencer a Europa de no prohibir productos avícolas brasileños.

La controversia por las exportaciones de pollo surgió después de que la policía federal brasileña implicó a BRF en una nueva fase de una investigación policial que afirma que intentó soslayar estándares de seguridad alimentaria.

Sin embargo, Maggi afirmó que no hay evidencias de problemas con las condiciones sanitarias del pollo brasileño.

“Esto no es (un tema) sanitario, es comercial”, sostuvo Maggi.

El ministro afirmó en una presentación que en virtud de los acuerdos comerciales actuales, el país sudamericano podría exportar 170.807 toneladas de pollo salado a la Unión Europea, pagando un arancel de 15,4 por ciento.