Política monetaria debe adaptarse al “nuevo normal”, según titular del BCP

Publicado en fecha 06-02-2018
Paraguay debe reconocer la importancia de la manera de hacer política monetaria en un escenario complejo y desafiante, teniendo en cuenta el “nuevo normal”, término que se refiere al nuevo escenario económico internacional al que se enfrentan todas las economías, expresó el presidente del Banco Central del Paraguay (BCP), Carlos Fernández Valdovinos, en una publicación de la prestigiosa revista América Economía.

En el caso de las economías emergentes, este nuevo normal engloba factores externos, como menores precios de las materias primas y condiciones financieras más estrictas, que escapan al control de los hacedores de política económica, explicó el presidente del BCP.

Es necesario reconocer que las nuevas condiciones globales ya no contribuyen al crecimiento como durante los ‘años dorados’, las políticas domésticas se vuelven mucho más relevantes para evitar una profundización de los problemas originados en factores externos”, detalla el titular de la banca matriz, en el análisis publicado por la Revista América Economía en su edición de noviembre, diciembre 2017.

Fernández Valdovinos clasifica las principales acciones que deben considerar los bancos centrales a la hora de llevar a cabo la política monetaria y las definió como las “cuatro C”, que son la Comunicación, el Cálculo, la Coordinación y el Compromiso.

Una buena COMUNICACIÓN es el primer instrumento que debería utilizar un banquero central en todo momento y, en especial, en tiempos de alta incertidumbre. La banca matriz, independientemente que sea de un país avanzado o emergente, debe trabajar en un entorno cambiante y complejo, resaltó.

En esta coyuntura, para una correcta implementación de sus políticas, las autoridades monetarias requieren información certera acerca del producto potencial de la economía. Ello requiere un CÁLCULO preciso de la real capacidad de crecimiento de una economía, agregó.

La política monetaria no puede mantener una economía estable y en crecimiento por sí sola. Se necesita del apoyo de la política fiscal. Un Ministro de Hacienda puede ser el mejor amigo o el peor enemigo de un banquero central. Es por ello que la COORDINACIÓN entre la política monetaria y fiscal es una condición necesaria para mantener la estabilidad macroeconómica en el mediano plazo, remarcó.

Es fundamental que los bancos centrales reafirmen nuevamente su COMPROMISO con la estabilidad de precios. Estudios demuestran que la mejor contribución que puede hacer un banco central a la sociedad es mantener una inflación baja, estable y predecible, añadió

Estas cuatro Cs no pretenden englobar todos los aspectos que los encargados de política monetaria deben considerar, pero será indudablemente importante tomarlas en cuenta bajo el ‘nuevo normal’ que enfrentan nuestras economías. En gran parte, ellas reflejan lecciones que hemos aprendido en coyunturas pasadas, pero que son aplicables al actual escenario global, sostiene Fernández Valdovinos

Los bancos centrales, en su función de salvaguardar la estabilidad macroeconómica, deben permanecer siempre alertas, utilizando con flexibilidad y de la mejor manera posible el conjunto de herramientas disponibles para el cumplimiento del mandato que la sociedad les asigna, concluyó en su análisis para América Economía.